SONETO
ENGRANDECE EL HECHO DE LUCRECIA
¡Oh famosa Lucrecia, gentil dama,
de cuyo ensangrentado noble pecho
salió la sangre que extinguió, a despecho
del rey injusto, la lasciva llama!
¡Oh, con cuánta razón el mundo aclama
tu virtud, pues por medio de tal hecho,
aun es para tus sienes cerco estrecho
la amplísima corona de tu fama!
Pero si el modo de tu fin violento
puedes borrar del tiempo y sus anales,
quita la punta del puñal sangriento
con que pusiste fin a tantos males;
que es mengua de tu honrado sentimento
decir que te ayudaste de puñales.
Sor Juana Inés de la Cruz