EN EL ÁLBUM DE GOTTSCHALK
I
Rompe tu piano, Gottschalk, pues cuando tocas, mientes;
El mundo que tú sueñas no es el mundo en que estás;
No ve lo que tu miras, no palpa lo que sientes:
Tú dices «¡esperanza...!» y él contesta «¡jamás!»
II
Como un alba de vida, como un ala de fuego
Me tocas cuando tocas, me hieres cuando das...
Callas, y entre tinieblas abandonado y ciego
Busco en vano «¡esperanza...!» sólo encuentro «¡jamás!»
III
No pidas un consuelo al corazón que agitas;
Los lauros que recoges te martirizan más:
Los suspiros que arrancas, las lágrimas que excitas
Nada dice «¡esperanza!» todo dice «¡jamás!»
IV
El genio es un abismo sediento de agonías
Que atrae y absorbe al hombre cual otro Satanás;
Cristal que hace más negros nuestros revueltos días
Mintiendo una «¡esperanza!» que desmiente un «¡jamás!»
Nueva York, septiembre 14: 1855.
Rafael Pombo