17-8-2003
Las canciones de la noche tropiezan en las escaleras del silencio
y el demorado parpadeo de los segundos tirita al fondo de un azul
radiante
Entonces late el brillo de los cuerpos bañados por la luz
y alguien siente que en el principio todo es palabra
Las tumbas del amor oscuro se encierran en los extraños pasos
del tiempo
y brota hacia la muerte la luz difusa del dolor
instalado en la conciencia como un pájaro profundo
que emite radiaciones hasta donde no llega la música de las horas
cuando la tarde es una estatua de plomo al borde del abismo.
Luis Llorente Benito