PRONTO SERÉ LA NADA
Pronto seré la hierba
que se asoma a la tierra
alfombrando el camino
donde crecen las flores y los pinos,
y la luz de los días
me besará de nuevo
cuando el sol haga mías
las mañanas que surgen de los cielos.
Pronto seré la nada
flotando en el recuerdo
y el amor que me diste
se quedará olvidado entre los besos.
Y una nube de sueños
como alondras vivaces
no volarán de nuevo
por la senda que amaron nuestros pasos.
Pronto seré del viento
un juguete que apenas
inventará unas alas
que transporten su ser a las montañas,
y la fuerza del aire
empujará mis huesos
para que mis cenizas
se transporten al fin hasta los cielos.
Pronto seré la tierra
que agarrada al olivo
alimenta sus ramas
besando sus raíces desde el suelo,
y llegaré a la copa
que frondosa se mece
al placer de su vuelo
disfrutando el perfume de sus hojas.
Pronto seré la nada
y ya no habrá mañanas
que acaricien mi sueño
cuando el sol se deslice en mi ventana,
y llegarán las horas
donde todo es silencio
y la luz de tus ojos
me inundará por siempre mientras duermo.
Pronto seré tan sólo
un recuerdo fugaz
que una vez escribiera
sentimientos atados a unos versos,
y otra vez en tus labios
sonarán mis poemas
como en aquellas tardes
adornadas de azul junto a los cerros.
Pronto no habrá palomas
volando entre mis sueños
para que como entonces
iluminen la fe de mis deseos.
Y no habrá más canciones
que acaricien recuerdos
como vivos presentes
abrazados al filo de los cuerpos.
Pronto seré la nada
como todo es la nada
cuando llega el momento
de salir de la vida con el tiempo.
Y no habrá enfermedades
que me amarguen la vida,
ni un dolor, ni una herida
que consiga inquietarme mientras duermo.
Pronto no habrá nostalgia
rescatando el olvido
ni una brisa lejana
que acaricie tu pelo mientras miro,
ni un porqué una mañana,
ni un adiós a un amigo,
ni una vieja mentira
que rompiera un amor no transgredido.
Pronto no habrá colores
que adornen tus mejillas,
ni veré más tu rostro,
ni la luz en tus ojos reflejada.
Y besarán tus labios,
rezando una oración,
las fotos que hace tiempo
llevaste junto a ti en tu corazón.
Pronto seré la nada
y dormiré ese sueño
del que nadie despierta
para que pueda descansar el cuerpo,
y ya no habrá injusticias
atadas a mis pasos
y ya no habrá razones
que se invoquen al hilo de fracasos.
Pronto seré la nada,
pronto serás la nada,
como todo lo vivo
cuando llega el momento del ocaso,
y la luz en el cielo
continuará brillando
porque pasa la vida
pero el cielo la mira mientras tanto.
Luis Calama Rodríguez