I
Yo soy un hombre
que olvidó los principios,
pues como bien sabéis
siempre estoy en las últimas.
Quien quiera que me compre,
porque ahora ando de saldo
como un CD pirata,
y con cuarto y mitad de un mal soneto
voy, cojo y me conformo.
Si sabéis esperar,
si no os entran las prisas
de comprar un poeta
a bote pronto,
debo advertiros,
mis queridos obsesos de la rima,
que en enero me ponen en oferta
dos por uno:
“Tristezas escogidas”
y un fascículo
de las obras completas
de Pemán.
Jota Siroco