A LORENA
Y te sueño que vienes a mí,
vestida de rayos y tormentas.
Y yo,enmedio del desierto de mi soledad,te recibo ciego y sediento.
Me alumbras con tu rayo fulgurante, y me bañas con tu húmedo recuerdo.
Así... No quiero amanecer.
Así... No quiero despertarme.
¡Ah! Soledad más espantosa.
¡Ah! Ingrato exilio de tí que tengo.
Ojalá y un día,esté inmerso en tu tormenta luminosa.
Ojalá y un día,tu humedad deliciosa,envuelva a mi desierto.
José Mario Olmedo Baratta