ÚLTIMO CIELO
Llega el pase hasta el límite
de la ciudad rumorosa. Más allá,
descampados y paños tendidos,
tal vez sábanas, tal vez
vendajes o sudarios.
No avancemos ya más. Vertiginoso
es el atardecer en la llanura.
Sopla la muerte nocturna su reclamo
y en un murmullo de oración
responde el alma.
Guillermo Pilía
Incluido en Antología poética (1979-2000).