LEÓN A. SOTO
Poeta sensible, delicado y fino,
tu amor por esta tierra en que naciste,
a ser un Mártir te arrastró el destino,
y a manos de un verdugo sucumbiste.
Ante una dictadura que sufriste
y al ver tanta impiedad y desatino,
como un gallardo paladín te erguiste
envuelto en el fragor del torbellino.
Tu altivez y coraje de esa noche
en que hiciste titánico derroche
de valor y encendido patriotismo.
Alumbraron del pueblo la conciencia,
y goza hoy de libertad el Istmo
que recuerda tu mártir existencia!
Elías Alaín Acuña