NUNCA ES TARDE AMOR

Nunca es tarde amor para las sanar heridas,
curar desamores, y amar imposibles.

Tampoco lo es para superar el infierno
Y ver la luz después del invierno.

Y es que tu tiempo es mi tiempo;
Estamos a tiempo de amarnos
O, si lo prefieres, listo estoy, de aborrecernos a destiempo.
Sabia es la virtud de conocer el tiempo,
y desatarse a tiempo.

Por eso es que nunca es tarde amor.
Nunca para amarnos de a poquitos, con ruido o en silencio
Pues es más triste el desamor
O soportar en silencio el desgarrarse el alma.

Pero si no quieres, no.
Ya no importará que otro te quiera y otro te ame,
porque a través de ellos te amo yo.

Me importará poco que los ames
y los desees porque al amarlos y quererlos, me amas a mi.

Te robaré los besos con el viento, las caricias, la sonrisa,
Te morderé los labios, gemiré contigo, dormiré, despertaré y estarás ahí, luciérnaga caprichosa inundando mi espacio con tu luz.

Ya te dije, si no quieres. No
Tu eres pues, en resumen, una orquídea,
inmensamente bella, inalcanzable, en un bosque humano,
de desvaríos y de tristezas,
de risas y miedos. Eres todo en uno.

Qué mas podría decir... desear
un desdichado terrenal como yo?
Que sólo con verte me conformo,
con saber que estas bien me extasío
y con saber que vives, vivo,
que respiras, respiro, que caminas, camino y que,
cuando duermes sueño, y sueñas

Que vibren tus tímpanos al paso del viento,
Que se cierren tus ojos,
mientras tu alma llora, se desgañita en silencio.

Contigo yo me he dormido bajo el cielo de tu tierra,
Sueño, medito, amo como se aman las estrellas.

Me quedaré aquí junto al árbol;
Esperaré paciente hasta que las raíces me absorban
y me devuelvan a ti en pétalos y frutos y en leña y en madera.