LAMENTOS
Intenta salir un grito de mis entrañas,
cuán aire aprisionado motivo de presión,
mas con el segundan las lágrimas
y no debo expresar mi dolor,
debo dar la impresión, que todo está bien,
mientras me quema por dentro
esta tormentosa desolación.
Quiero llorar, deseo gritar,
pero mi cordura me obligo a conservar,
demostrar mi dolor, mi desconsuelo,
sería entregarle mi vida sin algún impedimento,
negarme a mi misma,
postrarme a sus pies,
aceptar que él es quien mi sueño desvela,
y mi corazón conserva.
Me lastima sin siquiera saberlo,
sin saberlo él, sin saberlo yo,
no sé por qué así me siento,
cuando no le debo nada,
ni si aún él me debiese.
Me hallo postrada en el suelo
lamentándome y recriminándome,
estoy acostada en la hierba,
lamentando el pasado, el hoyo,
en el cual sin saberlo, caí tiempo atrás,
lamentando el no haber hecho.
Mi cara arde, por la furia y el despecho,
me refresco en el arroyo,
no puedo cambiar lo pasado,
pero puedo mi dar palabra
que la próxima, no será igual.
Ana C. Vásquez