DESACIERTOS
Mientras cierto planeta es presa
de una suerte de invasión de antenas,
y ningún hogar escapa
a la pequeña vidriera electrónica
que, según dicen,
siempre tiene la verdad,
yo estoy acá parado
sin saber adónde ir.
Cuando todas las manos parecen hechas
para amar al teclado salvador,
y el maravilloso shopping
se encuentra al alcance de nuestro enter,
regalándonos así
ese tiempo que tanto facturamos,
yo estoy acá tirado
sin ganas de dormir.
Será que nací un día equivocado,
es decir que soy uno más
entre la infinidad de personas
que confundieron su día.
Alejandro Laurenza