EL PERFECCIONISTA
Yo arruiné este poema
Eliminé palabras
y le torcí el cuello a la sintaxis
hasta dejarla sin habla
Ahora
no es ni la sombra
de lo que era
De tanto castigarlo
quedó reducido a nada
Ignoro de qué hablaba
No sé cómo termina
Óscar Hahn