EL PÁJARO REVOLUCIONARIO
Ordena el cerdo granjero:
«¡Fusilen a todo pájaro!»
Y suelta por los trigales
su policía de gatos.
Al poco rato le traen
un pajarillo aterrado,
que aún tiene dentro del pico,
un grano que no ha tragado.
«¡Vas a morir, por ratero!»
«¡Si soy un pájaro honrado,
de profesión carpintero,
que vivo de mi trabajo!»
«¿Y por qué robas mi trigo?»
«¡Lo cobro por mi salario,
que Vd. se negó pagarme,
y aún me debe muchos granos!,
y lo mismo está debiendo,
a los sapos hortelanos,
a mi compadre el hornero,
y al minero escarabajo,
a las abejas obreras,
y a todos los que ha estafado.
»¡Vd. hizo su riqueza,
robando a los proletarios!»
«¡Qué peligro!, ¡Un socialista!
¡A fusilarlo en el acto!»
«Preparen, apunten..., ¡fuego!»
«¡Demonios, si hasta los pájaros
en la América Latina,
se hacen revolucionarios!»
Óscar Alfaro