UNA CANCIÓN EN EL MAGDALENA
(COLOMBIA)
Sobre el duro Magdalena,
largo proyecto de mar,
islas de pluma y arena
graznan a la luz solar.
Y el boga, boga.
El boga, boga
preso en su aguda piragua,
y el remo, rema; interroga
al agua.
Y el boga, boga.
Verde negro, y verde verde,
la selva elástica y densa,
ondula, sueña, se pierde,
camina y piensa.
Y el boga, boga.
¡Puertos
de oscuros brazos abiertos!
Niños de vientre abultado
y ojos despiertos.
Hambre. Petróleo. Ganado...
Y el boga, boga.
Va la gaviota esquemática,
con ala breve y sintética,
volando apática...
Blanca, la garza esquelética.
Y el boga, boga.
Sol de aceite. Un mico duda
si saluda o no saluda
desde su palo, en la alta
mata donde chilla y salta
y suda...
Y el boga, boga.
¡Ay, qué lejos Barranquilla!
Vela el caimán a la orilla
del agua, la boca abierta.
Desde el pez, la escama brilla.
Pasa una vaca amarilla
muerta.
Y el boga, boga.
El boga, boga,
sentado,
boga.
El boga, boga,
callado,
boga.
El boga, boga,
cansado,
boga...
El boga, boga,
preso en su aguda piragua,
y el remo, rema: interroga
al agua.
Nicolás Guillén