X
Pena remueve la lumbre
y pone el mantel de nieve;
ha mudado sus vestidos
y peinado su rodete,
dejando al aire la nuca
fresca, suave y transparente.
Cuando pasa por mi lado,
deja en el aire que mueve,
una estela de limpieza
que mi sentido estremece.
Pena es solícita y fiel,
Pena sin duda me quiere.
—¡Ven, Pena, deja las cosas
y bésame hasta la muerte!
José Moreno Villa