EN UN ABANICO
Ala que en ebúrneos mimbres
mecerán dedos pequeños,
columpia cuando te cimbres
¡muchos sueños, muchos sueños!
Y sostenlos en el aire,
ya que leve el sueño es,
con la gracia y el donaire
de abanico japonés.
Manuel Gutiérrez Nájera