LA MEJOR GALA DE ABRIL
Del ledo Manzanares
En la galana orilla
«Entre olorosos céspedes
La tierna yerbecilla
Pace el cordero cándido,
Y con balido trémulo
Saluda a la aurora del plácido Abril.
La vid enamorada
Al olmo fiel asida
Tiende los verdes pámpanos
Sobre la copa erguida;
Y entre sus brazos lúbricos
Retoza el blando Céfiro
Nuncio delicioso del plácido Abril.
Y en el jardín ameno,
Y en el risueño prado
Abren las flores vírgenes
El seno embalsamado.
Brota la espiga próvida,
Y el impaciente agrícola
Entona loores al pródigo Abril.
De Progne ya resuena
El canto apetecido
Que en torno gira rápida
Del amoroso nido,
Y el ruiseñor armónico
En los gigantes álamos
Con dulce gorjeo bendice al Abril.
No empero el corderillo,
Ni la vid tortuosa,
Ni el Cefirillo alígero,
Ni la encarnada rosa,
Ni la espiga benéfica,
Ni los alegres pájaros
Subliman la gloria del plácido Abril.
Tú, mi gentil Rosana;
Tú, que a Venus afrentas,
Y hasta el paterno piélago
Con tus gracias la ahuyentas;
Tú, pastora bellísima,
De tantas almas ídolo,
Tú eres la gala más linda de Abril.
Manuel Bretón de los Herreros