CORONA PARA EMILIO
(A SU HIJA BLANCA)
Del paternal cariño predilecta,
¡Oh flor de mi rosal, oh blanca aurora,
Que en la noche del crimen y la cárcel
Su cielo iluminaste encantadora!
Por tu candor y tu belleza, imagen
Del ángel luminoso de la gloria,
Que tu mano infantil ponga en su féretro
Esta humilde corona a su memoria!
Setiembre 10 de 1887.
Alejandro Magariños Cervantes