DESPILFARROS
III
Todo es sórdido: un río
turbio como un reptil
soñoliento que cruza el caserío,
mientras subraya el frío
sempiternos crepúsculos.
Intermitentemente
desgrana el cielo gris
su crónica cistitis. Un ambiente
de sótano, un ambiente
palúdico y viscoso.
Pero en un pobre techo de madera,
de hoja de lata y cinc,
se abre una enredadera
como un sarcasmo de la primavera
sobre tanta bazofia...
Luis Carlos López