POPULUS NIGRA
No la chopera, que apenas
sabe esbozar un fácil canto verde:
pero el que canta como un pueblo entero
es el pinar,
la gloria silenciosa
del aire entre las ramas.
La alta gloria callada
del viento entre los pinos.
Su clamoreo largo y sostenido
se funde con la carcajada
de un tren que pasa, al margen, fragoroso,
por la vía apartada. “¡Corre, que lo pierdes!”
(No corras. Más bien báñate
dentro de este oleaje
sonoro. Ensordece en su seno.)
Entre Valhondo y Los Morales; tarde ceñuda del 16 de mayo 2005.
Luis Cañizal de la Fuente