TU ALMA
En la luz de la aurora,
Bella como al amor pinta el deseo,
Que las montañas dora,
Y las nubes colora,
La blanda risa de tus labios veo.
Cuando en la tarde umbría,
Llenando el aire de celajes rojos,
Muere en la sombra el día,
Parece que me envía
Los tristes rayos de tus negros ojos.
Si de la noche el viento
Vuela indolente en apacibles giros,
En su armonioso acento
Escucha tus suspiros,
Ansioso de tu amor, mi pensamiento.
Y cuando su riqueza
Despliega el cielo en la serena calma
De su mayor grandeza,
Entonces de tu alma
Contemplo mudo la inmortal belleza.
José Selgas y Carrasco