CANTO DEL VIAJERO
Hoja seca que cuela indecisa
Y arrebata violente turbión,
Así vive en la tierra el viajero,
Sin norte, sin alma, sin patria ni amor.
Busca ansioso doquiera la dicha
Y la dicha se aleja fugaz:
Vana sombra que burla su anhelo!...
Por ella el viajero se lanza a la mar!
Impelido por mano invisible
Vagara confín en confín;
Los recuerdos le harán compañía
De seres queridos, de un día feliz.
Una tumba quizás en el desierto
Hallara, dulce asilo de paz,
De su patria y del mundo olvidado...
Descanse tranquilo, tras tanto penar!
Y le envidian al triste viajero
Cuando cruza la tierra veloz...
Ay! no saben que dentro del alma
Existe un vacío de falta el amor!
Volverá el peregrino a su patria
Y a sus lares tal vez volverá,
Y hallara por doquier nieve y ruina
Amores perdidos, sepulcros, no mas.
Ve, Viajero, prosigue tu senda,
Extranjero en tu propio país;
Deja a otros que canten amores,
Los otros que gocen; tu vuelve a partir.
Ve, viajero, no vuelvas el rostro,
Que no hay llanto que siga al adiós;
Ve, viajero, y ahoga tu penas;
Que el mundo se burla de ajeno dolor.
José Rizal y Alonso