ESPACIOS INCRUENTOS
Espacios incruentos, rescatados
de la sangrienta historia,
del mañana feliz,
del falso tiempo.
Espacios incruentos de la carne
inmemorial y rediviva,
de su genésico secreto,
de su dulcísimo delirio.
Espacios incruentos del espíritu
—funámbulo inalámbrico—,
de la memoria
y del olvido.
Espacios incruentos que habitamos
cuando alejamos muerte,
cuando abrazamos vida,
¿cuando amamos?
o cuando lo decimos.
Jesús Munárriz