PROFECÍAS
Las gaviotas vuelan y nadie
se salva de existir.
Ni aun los compañeros que
murieron y esperan
un mundo sin desprecio. Me siento
en mis cavilaciones, cuido
que no se caigan del amor.
He sido, al menos. Ellos
pagan errores de la verdad.
Paseo a sus orillas para oír
esos oleajes, esas cuentas, las
profecías de su sombra agitada.
Juan Gelman