MAR - OLVIDO
El mar extiende un gris interrumpido
Por los profusos trémolos de espuma.
Tanta inquietud a tal vigor se suma
Que el mar rechaza su incesante olvido.
A través de la ola sucesiva
Se mantiene el rumor como un jadeo
Que resonando y resonando esquiva
La suave somnolencia sin deseo.
Por su cumbre la ola es verde y clara
Mientras va amoratándose el umbrío,
Balanceado valle, que no para
De volver a sentir su escalofrío.
Pero el gris se rehace, ya más llano,
Refiere su amplitud al horizonte,
Y a su color reduce aquel arcano
Que brega hacia una luz que lo remonte.
Y el oleaje se repite, suena
Como si fuese el mismo, soñoliento,
Monótono, rendido a su cadena,
De sí olvidado a cada movimiento.
Jorge Guillén