MÍSTICA
Ha venido una alma en la sombra,
se enciende y apaga,
vagarosa se pierde en los cerros
del bosque y la landa.
Me figuro que lleva cumplida
misión encantada,
y que vuelve de citas remotas
en nítida estancia.
Imagino que ha dicho memorias
con mudas palabras,
añorando las ígneas pasiones
la hora escarlata.
Hay una alma que vuela en la noche,
se enciende y apaga,
en la bruma buscando una estrella
de obscura mirada.
Misteriosa en la lívida nieve,
regresa callada
al azul cabaret de la noche
donde bebe el alma.
José María Eguren