RESURRECCIÓN
Esta noche sedienta yo me he preguntado
Quién eres y quién eres.
Por qué es triste tu carne como un leño apagado
Y por qué tienes llena la boca de alfileres.
Y despacio, esta noche yo te he separado
Como un árbol de amor, de las demás mujeres,
Y haciendo de mi sangre un agua he bautizado
Con ella tus angustias y placeres.
Y le he dicho a la muerte que no puede matarme
Y le he dicho a la vida que no puede vencerme
Y le he dicho a la tierra que si logra enterrarme,
A donde ella me entierre tú irás a recogerme
Y le he dicho a la nada que si logra apagarme,
Tú, con tus grandes besos, volverás a encenderme.
Jorge Debravo