DESDE ADENTRO
Es un lamento.
Es un grito sin lágrimas.
Desde adentro,
Desde el fondo de todo lo inevitable.
Desde el sollozo en espiral de espadas.
Desde la rama trágica
de un silencio perfecto.
Desde el azul caído
en los pies de la noche.
Desde la tempestad de
un sueño solitario.
Desde ti
y desde mí
grita un lamento
sin lágrimas
diciendo:
¡Adiós!
Julia de Burgos