A RÓMULO, QUE MATÓ A SU HERMANO REMO
Las armas tomó aprisa el esforzado
Quirino de su hermano mal seguro,
y en la nueva ciudad el primer muro
con la sangre fraterna fue manchado.
Primero dividido que fundado,
sintió el pueblo de Marte el hierro duro,
presagio cierto del rigor futuro
que amenazaba el disponer del hado.
No consintió a sus ojos ver presente
algún igual el ánimo ambicioso,
ni sufrió compañero la corona.
Al natural amor venció impaciente
el amor de reinar más poderoso,
que aun a su misma sangre no perdona.
Juan de Arquijo
La edición de Stanko B. Vranich trae este cuarto verso:
con la fraterna sangre fue manchado.