ÁNGELES SOBRE INGLATERRA
5
En las brumas de Londres algún día
se enlazarán tu sombra y mi pisada,
que llega tristemente rezagada
a este último rincón de la alegría.
El Támesis será cristalería
de tu esbelta figura, cimentada
sobre mi dualidad atormentada
de alondra y ciervo en ligazón tardía.
Porque he llegado tarde a la belleza.
Tarde a la pequeñez y a la grandeza.
Tarde al silencio, tarde al alarido.
Tarde al amor y tarde a la ternura.
Tarde a mi redención por la amargura.
Tarde a la soledad, tarde al olvido.
Germán Pardo García