MIS AMIGAS LOS HOMBRES
(CON COMPRESIÓN Y TERNURA)
Travestís operadas,
alhelíes enloquecidas,
imitantes de estrellas
—fundidas—,
palideces de cera de enfrente,
soledad con familia.
En la depresión me decía:
—Te quiero porque eres poeta
y porque eres un hombre...
—No, mira, no soy un hombre,
pero bueno sí,
es igual…
Y se durmió feliz sobre mi pecho
después de solamente,
mucho hablar.
Gloria Fuertes