CARTA DE MI PADRE A SU ABUELO
Aquí me tienes Pedro,
en este extraño mundo,
en donde ni siquiera
los ricos son felices.
Ya se han inventado las locomotoras,
las vitaminas y la leche en polvo.
Cambiamos de gobierno y nada se mejora.
En el solar de enfrente,
han hecho un conventillo
donde las monjas oran por nosotros,
—en el jardín tienen manzanas que no pueden comer—.
Mientras en Madrid quede un organillo....
Tus volúmenes de ética los vendí en la postguerra
y tan sólo conswervo tu reloj de papel.
Los chicos han crecido y quieren ser actores.
Maria se ha casado y Gloria escribe versos.
Yo tengo una bronquitis que me acerca a tu lado,
hasta pronte te digo, adiós abuelo Pedro.
Gloria Fuertes