GALLINITA CIEGA
Gallinita estaba
presa en su corral,
con la pata atada
en un matorral.
Gallinita cose,
cose un delantal
para su pollito,
que no sabe andar.
Gallinita llora:
«¡Kikirikiká!».
Se ha quedado ciega
de tanto llorar.
Gallinita ciega
busca en el pajar.
—¿Qué se te ha perdido?
—Aguja y dedal.
—Da tres vueltecitas
y lo encontrarás.
Gallinita ciega
gira sin cesar.
¡Pobre gallinita,
se va a marear!
Gloria Fuertes