EN DEFENSA DEL TACO
El taco.
Nada de que es pobreza de lenguaje
es todo lo contrario
riqueza y libertad de nuestro idioma.
¡Coño con los señores académicos que no
sueltan uno!
(así les va en la vida).
El taco evita bofetadas
bronquitis y altercados,
es ético, gracioso y sano
«canto por no llorar».
Yo taqueo por no matar.
Gloria Fuertes