Ira y amor me están dentro en el pecho
y cada cual me causa un mal extraño;
el amor fue principio del engaño;
después, del mismo amor nació el despecho.
Deseo aborrecer por mi provecho,
visto que del amor me viene el daño;
mas no basta la ira en mal tamaño
el nudo deshacer que amor ha hecho.
Ira me mueve a ser vuestro enemigo
y muéstrame razón por que lo sea;
mas ¿qué vale, si amor a amar me tira?
Y así mientras los dos tratan conmigo,
es fuerza que la triste alma se vea,
siendo esclava de amor, sujeta de ira.
Gutierre de Cetina