EL EFLUVIO DE PUERTO RICO
El efluvio de curva propiciante veda la lejanía.
Circuido de rosas, el instante.
A pesar del silencio, brota la profecía.
Espero la celeste acometida
porque el claro del bosque me convida.
El jardín se pasea por el río distante
y yo soy el amante florecido en rubor.
La vida se presenta enderredor de la rosa lejana,
y recibo la cálida mañana
en la instancia suprema del color.
Francisco Matos Paoli