VENGO DE OLVIDARTE
Vengo de olvidarte...
pero llego a casa y me tropiezo contigo,
en las cosas que me miran con tus ojos,
en las pelusas del pasillo
que me enredan leves,
con tu olvido.
Vengo de olvidarte...
y puede
que cambie de casa
y siga viniendo de olvidarte,
que cambie de cuerpo
y te siga deseando,
que cambie de vida
y te siga viviendo.
Vengo de olvidarte.
Tiro el bolso
y se cae el pintalabios,
un beso metálico en el parquet
me recuerda la ausencia de tu boca.
Con vocación de olvidarte
me muevo.
Cada minuto y centímetro
que salgo de mí misma
hago eso, insisto en ello.
Mi obstinación es olvidarte
mi trabajo es olvidarte
mi verso es olvidarte
mi insulto es olvidarte,
mi presente y mi futuro es olvidarte.
Y vengo y voy
para olvidarte.
Me duermo y me despierto
para olvidarte.
Soy lo que soy
para olvidarte.
Me voy a otras cosas
a otras casas
a otros seres
a otras páginas.
Me voy a otros versos
a otras voces
a otros canales
a otros ríos.
Me voy, me voy, me voy
continuamente.
Y cuando vuelvo…
abro la puerta
tiro el bolso
el pecho
la careta
y el tabaco…
y sé que vengo de olvidarte.
Belén Reyes