SONETO
Amar a dos, y a entrambas con fineza,
amor es, y el amor más entendido;
que más firme será contra el olvido,
si en dos bases estriba su firmeza.
Niñas, si me cortáis pieza por pieza,
hay para entrambas; y pues siempre ha sido
señal de sujeción darse a partido,
partidme, y no quebradme la cabeza.
Amor y odio, ya en el campo estrecho
del corazón batallas han tenido
juntos en él, aunque entre sí distantes.
Pues si a un tiempo tal vez dentro del pecho
dos efectos contrarios han cabido,
¿por qué no han de caber dos semejantes?
Antonio de Solís y Rivadeneyra