HISTORIAS
EN ÁFRICA
Techaban aires rápidos,
concéntricas del cielo,
curvas capas azules
de los jinetes negros,
dibujando turbantes
en sus caracoleos.
Más ancho que hondo, el campo
ofrecíase desierto
para la gran carrera
de los hombres aquellos.
Fugitivo horizonte
de polvo, lana y cuero,
la hilera de jinetes
se perdió tierra adentro.
Manuel Altolaguirre