VIEJOS RETRATOS
(Museo toscano)
Eran tan bellas, que vencieron
a la piedra y al bronce
e ilusionaron a las tablas,
a los lienzos y al muro,
para imprimir en ellos
su fragancia de carne
y espíritu, que ahora
nos turba la garganta
como ardiente perfume.
Eran frágiles — fuertes
en el amor — y suaves
estas hembras romanas,
vénetas, florentinas,
las rubias milanesas — y tenían
largos pactos secretos con el tiempo
y el amor, que ahora ofrecen
a los que no existíamos.
Ángel Crespo