anterior   aleatorio / random   autor / author   inicio / home   siguiente / next

A AMINTA, QUE TENIENDO UN CLAVEL EN LA BOCA, POR MORDERLE, SE MORDIÓ LOS LABIOS Y SALIÓ SANGRE

Bastábale al clavel verse vencido
del labio en que se vio (cuando, esforzado
con su propria vergüenza, lo encarnado
a tu rubí se vio más parecido),

sin que, en tu boca hermosa, dividido
fuese de blancas perlas granizado,
pues tu enojo, con él equivocado,
el labio por clavel dejó mordido;

si no cuidado de la sangre fuese,
para que, a presumir de tiria grana,
de tu púrpura líquida aprendiese.

Sangre vertió tu boca soberana,
porque, roja victoria, amaneciese
llanto al clavel y risa a la mañana.

autógrafo

Francisco de Quevedo y Villegas


El Parnaso español (1648)
Erato. Musa IV. Soneto


facsímil El Parnaso Español. Obra de Francisco Quevedo por José Antonio González de Salas (1648) BNE

subir / top   poema aleatorio   siguiente / next   anterior / previous   aumentar tamaño letra / font size increase   reducir tamaño letra / font size decrease